Podemos dividir la ruta en dos partes: por un lado una primera parte más corta pero repleta de senderos y una segunda más larga donde los caminos viejos toman protagonismo.
En la mencionada primera parte recorremos los senderos de la zona de Artaza hasta alcanzar la NA-7187. Tras un breve recorrido por asfalto, alcanzamos la localidad de Baríndano. Desde aquí, ponemos rumbo a las Calderas de Argonga.
En esta zona podemos atravesar el Río Uiarra por el puente existente o bien por el cauce, el cual baja seco gran parte del año. Una vez superado, emprendemos el ascenso por una pista en muy buen estado. En el kilómetro 14,5 tenemos la opción de iniciar el regreso o continuar ascendiendo hasta alcanzar la zona más alta de la Sierra de Lokiz. Merece la pena hacer el esfuerzo ya que arriba vamos a poder disfrutar de un sendero muy cercano al borde del cortado (sin ningún tipo de peligro) con unas espectaculares vistas.
El descenso lo hacemos por una rápida pista que nos deja en el sendero de Itxako. Aquí debemos tener precaución con el talud de la izquierda del sendero para evitar sustos. Tras 2 km de carretera, afrontamos parte del bonito sendero que hemos bajado al principio antes de finalizar la ruta.